No les creo nada

Dicen que cuando se hunde un barco, las ratas son las primeras en escapar; se tiran al agua, se pisan, se muerden, se matan; al fin y al cabo, son ratas.

El 2007 es año de elecciones, y las ratas ya comenzaron a mordisquear:

"Y el viernes, 40 minutos después de que el mandatario diera un mensaje en cadena nacional por el caso, el albañil apareció con vida."

"Según afirmó el ex intendente de Escobar, el imponente operativo que se montó la semana pasada para encontrar al testigo secuestrado fue todo mentira".

Leer la nota en Clarín.com

No les creo nada, ni al montonero devenido en albañil, ni a Luisito, que todas las noches reza para que vuelvan los militares y las picanas, ni al bizco mandatario lector de estadísticas.

El agua les está llegando al cuello, muchachos; corran, muerdan, pisen, maten... aunque todo esto ya lo saben hacer muy bien.

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